Maru, mi gran problema es que sé toda la teoría de cómo recuperarme de mi codependencia pero me falla la voluntad, soy demasiado EMPÁTICA y TOLERANTE. Me preocupo más por los demás que por mi persona. ¿Crees que algún día conseguiré superar ese trastorno cognitivo conductual? 

Estoy en un grupo de codependientes en la ciudad donde nací y donde vivo actualmente, Sevilla. Solo he asistido a una reunión de CODA, si no recuerdo mal, fue el 27 de abril de este año, pero desde ese día me ha sido prácticamente imposible, tenía una hermana hospitalizada en estado muy grave (dos meses en el hospital). Falleció el pasado viernes 14 de Mayo.

No he tenido ánimos ni apenas tiempo de trabajar los Doce Pasos, es más los he buscado en los diferentes grupos a los que me he unido pero no los veo para poder imprimirlos. Sé que primero tengo que trabajar los 12 pasos, me encuentro bastante perdida y confundida. ¿Cómo puedo hacerme con ellos, por favor? Carmen en Sevilla

Carmen, primero recibe mis condolencias por la pérdida física de tu hermana. Es lógico que en este tiempo experimentes agotamiento y desánimo. Aunque cada duelo es diferente, a mí me ayuda:

• Descansar.
• Reducir al mínimo los compromisos y obligaciones.
• Experimentar mis sentimientos.
• Practicar gratitud, contemplación, meditación y yoga.
• Ser receptiva a sentimientos de bienestar.

En estos post –Cambio de Residencia y Buen Viaje– cuento mi experiencia con pérdidas recientes de seres queridos. Quizás te ayuden. Aquí puedes ver algo de autocuidados que puede ser útil también.

En cuanto a tu pregunta, la respuesta es sí: te puedes recuperar de la codependencia. Millones nos hemos recuperado (y seguimos haciéndolo) trabajando los Pasos y encontrando el poder para sanar.

Fíjate, hay una diferencia muy grande entre estudiar la codependencia y tener el poder para sanarla. Es como la diferencia entre estudiar cómo mi automóvil usa gasolina para moverse o, efectivamente, ponerle gasolina.

Entonces lo que hacemos en el programa es re-encontrar el poder. Los Pasos son prácticas que nos hacen conscientes del poder que puede sanarme y que llamamos Poder Superior o Dios.

Sin embargo, si yo fuera tú, en este momento no me empeñaría en trabajar los Pasos, Carmen. En cambio, me dedicaría a escuchar charlas de otros que hemos encontrado la solución. También iría a reuniones de CoDA cada vez que pueda. Hoy en día las hay virtuales ¡y muy buenas!

Con solamente asistir a la reunión, aunque no te des cuenta, ya estás realizando los tres primeros Pasos que a mí me gusta parafrasear como: 1. Sé que no puedo 2. Hay algo mayor que yo que puede. 3. Elijo intentarlo.

Finalmente, uno de los grandes motivadores para trabajar los Pasos es tener una idea e ilusión hacia dónde voy. Para mí, las Promesas de CoDA son como esas fotos de viaje que me dan ánimo para viajar. Sigamos viniendo, el programa funciona cuando lo trabajo.